LA SOBERANÍA DE DIOS

Dios es Soberano en el Universo.

Dios es soberano sobre la salvación.

Dios es soberano sobre nuestro sufrimiento.

Dios es soberano sobre su misión global.

No hay límites para la regla de Dios. Esto es parte de lo que significa ser Dios. Él es soberano sobre el mundo entero, y todo lo que sucede en él. Él nunca está indefenso, nunca se frustra, nunca está perdido. Y en Cristo, la asombrosa y soberana providencia de Dios es el lugar que sentimos más reverente, más seguro, más libre.

Dios es Soberano en el Universo

Cada vez que Dios actúa, actúa de una manera que le agrada. Dios nunca está obligado a hacer algo que él desprecia. Él nunca está acorralado en un rincón donde su único recurso es hacer algo que odia hacer. Él hace lo que le plazca.

Dios es soberano sobre la salvación

Jesús murió no solo para ofrecer salvación al mundo, sino también para traer a su pueblo a sí mismo, para vencer su rebelión, y para juntarlos omnipotentemente para sí mismo.

Dios es soberano sobre nuestro sufrimiento

La razón última de que el sufrimiento existe en el universo es para que Cristo pueda exhibir la grandeza de la gloria de la gracia de Dios sufriendo en sí mismo para vencer nuestro sufrimiento.

Dios es soberano sobre su misión global

El Rey de reyes resucitado y reinante y el Señor de señores gobierna sobre este mundo y sobre su misión con soberanía absoluta. Nada está fuera de su voluntad soberana. Si se encuentra con resistencia, lo permite para sus propósitos, o lo supera para sus propósitos.